martes, 24 de julio de 2018

MANIFIESTO POR LA CONSERVACIÓN Y MEJORA DEL ACTUAL RECORRIDO OFICIAL DE LA SEMANA SANTA DE MÁLAGA

Ya se puede firmar en change.org este manifiesto. La dirección es:

https://www.change.org/p/agrupación-de-cofradías-por-la-conservación-del-actual-recorrido-oficial

El texto que acompaña es el siguiente:

La ciudadanía cofrade abajo firmante emite este manifiesto para su pública lectura y difusión entre el
mundo cofrade malagueño en relación al proyecto de modificación del recorrido oficial de la Semana
Santa que se encuentra en proceso de debate y aprobación por parte del ente agrupacional. Se efectúa
entrega del mismo en la Agrupación de Cofradías de Semana Santa de Málaga tras su pertinente
difusión pública. Por ello, manifestamos que:

Se reconoce, de forma preliminar, el esfuerzo y perseverancia desempeñados por quienes se encuentran desarrollando el proyecto de reforma propuesto por la Agrupación de Cofradías de Semana Santa ;nuestra total disconformidad con la filosofía desgranada y el proyecto modelado no exime nuestro respeto y reconocimiento por la labor desarrollada en aras de un plan integral de renovación del recorrido oficial, que creemos, no obstante, aplicable al actual trazado.

Plasmada esta consideración de apertura.



VALORES PATRIMONIALES DEL ACTUAL RECORRIDO OFICIAL

El trazado del actual recorrido oficial (en adelante RO) de la Semana Santa de Málaga se ha mantenido con total vigencia hasta la actualidad, tanto por la aceptación y apropiación popular del mismo, altamente enraizado en el imaginario colectivo de la ciudad, como por su natural imbricación en el entramado urbano. Defendemos esa vigencia, abogamos por su permanencia y apostamos por la
pervivencia de un trazado inherente a la historia cofrade de la ciudad.

La realidad, material e inmaterial, que circunda al trazado histórico por el que discurre el RO forma
parte indisoluble del contingente patrimonial que conforma la celebración ritual de la Pasión de Cristo en el caso de la ciudad de Málaga; es por esta razón por la que se reconoce el papel capital del RO en la conformación del modelo procesional de nuestra ciudad y, por tanto, se insta a su preservación al erigirse en una seña de identidad indiscutible de nuestra Semana Santa.

Para poder valorar con rigor este complejo fenómeno histórico, urbano, arquitectónico y antropológico,  como es la configuración del RO de la Semana Santa, se considera imprescindible identificar aquellos valores patrimoniales que refrendan esta manifestación inmaterial como un hecho cultural absolutamente valioso para el entendimiento de nuestra sociedad.

El discurrir de los desfiles procesionales por el mismo trazado urbano a lo largo de casi un siglo
demuestra el arraigo de la celebración cofrade en la ciudad y confirma su valor histórico, al mismo
tiempo que la continuada celebración de la paraliturgia católica por las principales calles de la ciudad
conlleva un ejercicio de sacralización del espacio urbano que contamina la trama de la ciudad histórica, verificando el valor religioso de la fiesta. La exteriorización del rito en un contexto tan paradigmático como son los casos de la Alameda Principal y la calle Larios, modelos indiscutibles de las propuestas higienistas promulgadas por los nuevos aires europeos, resultan una conjunción perfecta entre continente -la ciudad- y contenido -los tronos- que refuerzan los valores arquitectónico y urbano que están implícitos a este RO. Así mismo, la trascendencia y el alcance que esta manifestación inmaterial ha tenido a lo largo de los siglos, con especial hincapié en su modelo y configuración, la convierte en unvalioso ejemplo que remite a la mermoria colectiva de la ciudad y ayuda a la comprensión de la socie dad pasada, recalcando así su indiscutible valor antropológico.

Comprender las causas, tanto históricas como urbanísticas, de la transformación de la ciudad de Málaga es esencial para poder entender la génesis y consolidación de un nuevo modelo procesionista en las primeras décadas de los años veinte, que tiene en el RO el tablero de juegos idóneo para su perfecta consecución. 

Este hecho -que puede ser constatado en la historiografía- es indispensable para dimensionar
el verdadero protagonismo que posee el actual RO, sin el que sería completamente imposible,
entender el desarrollo de la Semana Santa a lo largo del siglo XX y, por consiguiente, la consagración
de una forma de entender la realidad cofrade, diametralmente opuesta a la de otras ciudades vecinas.

El actual RO posibilitó el marco espacial y urbano preciso para la definición de un nuevo paradigma
procesionista. La ciudad de Málaga, como urbe cofrade, no puede renunciar al entendimiento de su singular realidad urbana, siendo preciso en estos momentos atender a las características urbanísticas que definieron la Málaga decimonónica para tomar consciencia que la consumación de este nuevo modelo deriva, directamente y sin lugar a dudas, de este paradigma de ciudad ilustrada acontecido en Málaga en base a los nuevos viarios y espacios urbanos desarrollados desde finales del siglo XVIII hasta las primeras décadas de la centuria pasada.

Sea también preciso reafirmar el sentido del recorrido de esta celebración poniendo de manifiesto que
la secuencia dinámica se produce históricamente con un trazado con sentido ascendente y  onvergente
al corazón de la ciudad: la antigua plaza de las Cuatro Calles, entendida como el gran espacio ritual,
el gran ágora heredada de las civilizaciones anteriores y que ha trascendido a la propia materialidad de la urbe. 

Es por esta razón que la construcción de este paisaje cultural, que se dibuja de forma intermitente
y efímera año tras año, se ha aposentado en la memoria de todos los malagueños, como parte
indisoluble del alma de la ciudad, erigiéndose así el trazado del RO como un elemento de apropiación
social que debe ser preservado para la correcta lectura del fenómeno de la Semana Santa.





PROBLEMÁTICAS DEL ACTUAL RECORRIDO OFICIAL

La configuración de los horarios e itinerarios de la Semana Santa de Málaga en los últimos lustros se
ha resuelto, por lo general, en base a decisiones individuales en lugar de afrontar la problemática existente desde un punto de vista global. El crecimiento de la Semana Santa, con el aumento del número de hermandades en las nóminas de las distintas jornadas, unido a la asignación vigente de tiempos de paso -que no se ajustan proporcionalmente a la envergadura de los cortejos nazarenos y a las particularidades de las distintas cofradías-, ha propiciado la perpetuación de carencias en la estructuración de las jornadas que, a día de hoy, persisten sin una resolución satisfactoria.

Por una parte, la adaptación de la Semana Santa a los hábitos y usos de la ciudadanía, con la que
interrelaciona de forma simbiótica como ejercicio público de fe (relación transmisor-receptor), se ha
traducido en progresivos adelantos de las hermandades en el orden del día correspondiente. De otra
parte, la no consideración del criterio geográfico de emplazamiento de las respectivas sedes canónicas de las hermandades ha llevado a una situación límite en distintas jornadas de la Semana Santa, con perjuicio para las últimas hermandades del día.

La problemática, real e innegable, de horarios e itinerarios existentes en nuestra Semana Santa es
consecuencia de una serie de deficiencias en su gestión y en la configuración administrativa que, en
ningún caso, debe ser relacionada con el actual trazado del RO y, en absoluto, requiere de una modificación del mismo para su resolución, sino la aplicación de soluciones efectivas en base a análisis objetivos de los conflictos existentes hasta el momento.



FUNCIÓN DE LA AGRUPACIÓN DE COFRADÍAS

La Agrupación de Cofradías de la Semana Santa de Málaga debe estar al servicio de las cofradías, no
debiendo concebirse la posibilidad de causar un perjuicio a ninguno de sus miembros. La ideación
de un proyecto que perjudique a entidades del ente provoca desde su nacimiento un conflicto de los
legítimos intereses de sus integrantes, provocando un enfrentamiento entre los mismos que va contra
el espíritu de unidad de la institución. Del mismo modo, conviene subrayar que es el RO el que debe
estar al servicio de las cofradías, como impera la lógica, y no al revés, como se desarrolla en la filosofía del proyecto propuesto. A través de esta premisa, no se comprende cómo las malas gestiones con respecto a la inflación de abonados en el RO -aumentando su aforo progresivamente hasta llegar a esta situación de sobreoferta- vayan a acabar repercutiendo negativamente en los propios miembros de la entidad, las corporaciones nazarenas, los cofrades de a pie, los vecinos del centro, los comerciantes, hosteleros y hoteleros y la ciudadanía en general.




CONSIDERACIONES SOBRE EL RECORRIDO OFICIAL PROPUESTO
Se desglosan, de forma pormenorizada, una serie de argumentos que invalidan las razones que promueven el cambio de RO como la solución a la problemática actual:


SOBRE LA ACCESIBILIDAD. 

Se argumenta una mayor accesibilidad del RO propuesto frente al actual en referencia a las variables de entrada y salida del mismo. Esta afirmación se desmiente en el análisis comparativo de las vías de acceso al RO, sin considerar las posibles variables de calles adyacentes y tomando únicamente como referencia las vías de desembocadura directa al RO, admitiendo el actual trazado tres vías de entrada (lateral norte de la Alameda, acceso oeste por puente de Tetuán, lateral sur de la Alameda), por las dos que permite el nuevo (calle Especería y Constitución a través de calle Granada).

 Del mismo modo, analizadas las salidas del RO, el actual trazado permitiría las mismas salidas que el nuevo propuesto (calle Calderería, calle Granada y entorno Catedral por Duque de la Victoria
o Molina Lario en el actual; Postigo de los Abades, plaza del Obispo y Strachan siempre y
cuando calle Larios estuviera expedita). Por ende, se razona la invalidez del argumento.


SOBRE LA PERMEABILIDAD.

 Demostrado que no se ve aumentado el número de accesos y salidas que supongan una mejora de la accesibilidad del RO, cabría reflexionar sobre la permeabilidad del nuevo trazado en lo referente al público. El mayor número de vías de acceso -citadas en el punto anterior- del actual RO y el hecho que presentan una sección viaria suficiente para la convivencia de las hermandades y la disposición del público congregado, favorece notablemente la movilidad.

Por contraposición, el menor abanico de posibilidades de vías para acceder al nuevo RO propuesto, y su limitada sección viaria dificultan notablemente la circulación y el control de las aglomeraciones. El eje Cisneros-Especería amenaza con erigirse como una vía saturada por constituirse, según los recorridos naturales de llegada de las cofradías, en la principal vía de embocadura a la tribuna oficial.

Según los recorridos naturales que se desarrollan en la actualidad y considerando el trazado
propuesto, jornadas como el Martes Santo, donde todas y cada una de las cofradías alcanzarán
el RO por el eje Cisneros-Especería, o el Jueves Santo, en el que de forma sucesiva
accederán hermandades -que suscitan gran cantidad de espectadores en las calles- procedentes
de la franja oeste del Centro y El Perchel, harán de este eje un espacio totalmente
saturado e inhabilitado para la visualización de las hermandades con los consecuentes problemas
de seguridad que de ello puede derivarse.

Esta circunstancia puede verse agravada a tenor del reciente anuncio por parte de la Congregación de Mena de suprimir el paso por calle Carretería, lo que propiciará un doble tránsito -ida y vuelta- por esta vía.




SOBRE LA SEGURIDAD.

Aseverar que el nuevo RO solventará todos los problemas de seguridad que plantea el trazado actual es una afirmación absolutamente interesada. Es difícilmente razonable que el RO propuesto, a modo de “U” abigarrada, mejore en prestaciones de seguridad y evacuación un trazado lineal, con dos ejes consecutivos a 90º, donde son explícitas las posibilidades de evacuación.

El trazado del RO propuesto presenta dos problemáticas inherentes a la geometría del mismo.
Por una parte, la dificultad de evacuación de las dos áreas encuadradas por diferentes tramos en paralelo del RO -caso del área concertada entre Atarazanas y la Alameda y caso de la confinada entre Larios y Molina Lario- donde los abonados situados en las localidades colindantes presentarán notorias dificultades en caso de una perentoria evacuación. Por otra parte, la existencia de tramos de RO en paralelo dificultará el tránsito de los ciudadanos de una parte a otra del RO, disminuyendo considerablemente la permeabilidad del mismo respecto al actual.


SOBRE LA EQUIDAD.

En relación a la máxima refrendada por los promotores del cambio sobre que el trazado propuesto favorece la llegada, de forma más natural y accesible, de las hermandades al RO, se considera que esta afirmación no es sostenible sobre el plano.

 El actual trazado oficial ofrece un equilibrio inmejorable en relación a la distribución geográfica
de las hermandades; así, su desarrollo según un eje sur-norte compensa y pondera el desarrollo
de los itinerarios de las hermandades, de modo que aquellas que tienen próxima su entrada al RO -vertiente oeste y sur de la ciudad-, ven lejana su sede a la salida del mismo; de forma inversa, aquellas hermandades que recorren mayor distancia hasta alcanzar el RO -procedentes del norte y oeste de la ciudad-, quedan encaradas de retorno a sus sedes a la salida del mismo.

En cambio, el eje norte-sur-norte del RO propuesto descompensa el equilibrio reinante en el trazado actual, imbricando de forma natural el itinerario actual de muchas hermandades a un trazado oficial, pero adulterando de forma notable el trazado de otras cofradías que aumentarán la distancia recorrida tanto para acceder al RO como al salir del mismo.


SOBRE LA DIVERSIFICACIÓN DE ITINERARIOS

Se argumenta en la nueva propuesta de RO una mayor diversificación de los itinerarios de las hermandades, ampliando el callejero cofradiero. Esta afirmación es falsa a tenor de un análisis sobre las tablas horarias.

La explotación del callejero -Nueva, Fajardo, Strachan, Liborio García, Sebastián Souvirón, Sagastam que en los últimos años han podido promover las cofradías se debe, amén de a una mayor
sensibilidad por estos espacios, a las posibilidades que permite un RO que ocupa dos ejes
dispuesto en forma perpendicular -eje norte-sur Larios-Granada y eje este-oeste Alameda que
no interfieren en el discurrir por otros espacios urbanos de la almendra histórica.

Por contrapartida, el trazado del RO propuesto, donde se aumenta el número de metros
recorridos en el interior de un Centro Histórico reducido y limitado, unido a las limitaciones
lógicas a causa de las dimensiones de los tronos, conducirá a una homogeneización de los
itinerarios -redundando en los ya mencionados problemas de aglomeración de público- frente
a la dispersión que favorece el actual trazado.

Así, vías de un histórico sabor cofrade y capitales a la hora de entender nuestra historia procesionista,
como son Nueva y Carretería, van a ser grandes damnificadas en la configuración de los itinerarios de nuestras hermandades, derrumbándose el peso tradicional y actual que atesoran.

Además, es importante tener en cuenta que la vida cofradiera se encuentra en simbiosis con la ciudad, y no a la inversa; tener en contra a un colectivo consolidado, como han manifestado en las semanas previas los comerciantes, supondría un desequilibrio de la balanza relacional que pondría en jaque este fenómeno social, cultural y religioso.




SOBRE LA PROBLEMÁTICA DE HORARIOS. 

Se asevera con rotundidad que el nuevo RO propuesto solucionará “absolutamente todos” (sic.) los problemas actuales de horarios e itinerarios. Esta afirmación es falsa. El problema de fondo de buena parte de los actuales problemas de horarios e itinerarios reside en una distribución irreal y perjudicial de los tiempos de paso por el RO. De hecho, su abordaje decidido y justo en el contexto del actual RO solventaría buena parte de los problemas horarios vigentes en la actualidad. 

El RO propuesto conllevará un mero trasvase de los vigentes desajustes a un nuevo escenario en el que se perpetuará la visión de cortejos estirados de forma antinatural, prolongando de forma estéril
el tiempo de paso de las hermandades y, por ello, eternizando las jornadas procesionales teniendo una influencia directa en la permanencia del público asistente en el RO.

Una reestructuración coherente de las hermandades en las nóminas de cada día según criterios geográficos -problemáticas enquistadas como los horarios intempestivos en sus regresos de Cautivo y Expiración- es perfectamente abordable en el contexto actual con un ajuste razonable de los tiempos de paso.

Así mismo, comprendemos que la solución aportada con respecto a los tiempos de paso, consistente en un cambio de variable a “tiempo de desplazamiento”, es totalmente aplicable al actual RO.


SOBRE EL PAPEL DE LA CATEDRAL

Se reivindica la Catedral como marco colofón del RO aludiendo al papel penitencial que ello pueda conllevar. Esta afirmación está tergiversada y, además, emplea de forma ventajista el trascendental concepto de estación penitencial, cuya hondura litúrgica y espiritual merece que no se banalice en aras de la consecución de un proyecto.

El proyecto presentado ni siquiera contempla el paso de la totalidad de las hermandades por el atrio catedralicio, lo que choca frontalmente con las afirmaciones al respecto de este punto.

Exponer como valor de un proyecto una filosofía de la que se desconoce su aplicación práctica, ignorando las inquietudes penitenciales de sus destinatarios -las hermandades y cofradías-, resulta erróneo y significa adulterar la realidad debido a que la estación en la S.I. Catedral no está contemplada en la mayoría de las circunstancias.

De hecho, en la Semana Santa de Málaga, hacer estación de penitencia en la Catedral no es trascendental. Históricamente, es la Semana Santa que más desligada se encuentra de la Estación como premisa. A ello contribuyó la propia jerarquía diocesana cuando impidió que las hermandades pudiesen montar las procesiones en las iglesias; algo a lo que las cofradías respondieron con la hipérbole de los tronos y generando un modelo absolutamente propio, en relación a los espacios urbanos y no a los dinteles de los edificios sagrados.




SOBRE LA SEGUNDA PUERTA. 

Se afirma que gracias al RO propuesto se podrá abrir la segunda puerta de la Catedral. Esta afirmación se plantea como una falacia interesada (sí y sólo sí), tanto en cuanto que no es condición sine qua non a una renovación. La apertura de la segunda puerta de la Catedral puede llevarse a efecto, igualmente, con el actual RO.

SOBRE LA ESTÉTICA.

 Se argumenta que la nueva propuesta de RO, dentro de su reforma ntegral, permitirá una mejora estética del mobiliario y de los elementos decorativos. Esta afirmación es, nuevamente, interesada y tergiversada. Las soluciones estéticas planteadas: disposición a modo de palcos, disminución de la contaminación lumínica, embellecimiento del mobiliario, optando por reposteros en vez de lonas, pueden ser también admitidas -y requieren su aplicación-, del mismo modo en el actual RO, muy castigado e infravalorado por las distintas taras estéticas que, año tras año, se pretenden solventar y que nunca se han abordado con soluciones satisfactorias -especialmente con la colocación de pequeñas tribunas en la Alameda y la modificación de la tribuna principal en la plaza de la Constitución-.

SOBRE LA VENIA.

 Se afirma que el RO propuesto es condición sine qua non para permitir la petición de venia al comienzo del mismo. Esta afirmación es falsa y forma parte del anecdotario procesionista. El actual RO admitiría fórmulas para que la petición fuese realizada al comienzo del mismo, redundando en el valor simbólico de petición de venia sin alterar el trazado oficial. Esta solución pasaría por un cambio en la mentalidad implantada. En la actualidad resulta necesaria la presencia del presidente de la Agrupación de Cofradías, los hermanos mayores de las jornadas correspondientes y la autoridad eclesiástica; sin embargo, es habitual que en otras ciudades la venia se solicite a un delegado o vocal sin ningún tipo de despliegue protocolario similar. Esta modificación no supone ninguna alteración en el desarrollo tradicional ni conceptual de los desfiles.

PERJUICIOS PARA LA CIUDADANÍA

El RO propuesto aboga por un nuevo trazado donde se ve aumentada la cuantía de metros, y con ello
el número de vías, que ocupa del Centro Histórico, perjudicando a los cofrades de a pie que disfrutan
y buscan a las hermandades por los distintos enclaves del callejero urbano ajenos al RO. Entendemos
que el papel del cofrade que no contempla las procesiones en el RO no recibe la suficiente  consideración en la elaboración del proyecto presentado. Argumentos que sustentan esta idea se desprenden de la propia filosofía del proyecto:




SOBRE LA SATURACIÓN VIARIA. 

La referida y demostrada homogeneización de los itinerarios de las hermandades predispondrá a la aglomeración de público en vías comunes altamente transitadas -Cisneros, Especería, plaza del Obispo, Molina Lario- por las hermandades, pero ajenas al RO, con las limitaciones que ello puede suponer a efectos de movilidad de los asistentes a las procesiones.

 Las peculiaridades urbanísticas del Centro Histórico, caracterizado por su reducida extensión y demarcado por limitadas vías con ancho suficiente para el paso de los tronos, dificultará notablemente la búsqueda de alternativas para las hermandades debido a la alta ocupación viaria que se propone en el nuevo RO. Esta saturación contrasta con la exigua ocupación apreciable en el aforo del RO en notables tramos horarios de cada una de las jornadas, alcanzando una alta ocupación solo en momentos puntuales.

 Un trazado más largo pero que traslada los problemas de gestión actuales derivará, necesariamente, en un RO más extenso y con acentuación de la apariencia de vacío. Indudablemente, será un
factor psicológico negativo para los integrantes de los cortejos.

SOBRE LA PRIVATIZACIÓN DE LOS RECORRIDOS

El RO propuesto viene a representar la integración, a modo “oficial”, del recorrido actual de buena parte de las hermandades, donde un porcentaje notorio del trayecto va a ser sustraído de su itinerario, actualmente abierto imposibilitando una asistencia del público a pie de trono. 

El porcentaje de tiempo y metros de las hermandades en RO se va a ver notablemente aumentado; pero, proporcionalmente, va a ser  mucho más acentuado en hermandades céntricas, con itinerarios per se reducidos, en los que las opciones para los espectadores a pie de calle van a verse seriamente disminuidas. 

Si bien las tablas horarias que se han conocido a través de diversas fuentes son provisionales y estarán sujetas a cambios en las preceptivas reuniones de horarios e itinerarios, el análisis preliminar de las mismas arroja una serie de conclusiones y evidencias al hilo de lo expuesto que, en cualquier caso, no se verán modificados de forma notable. Así, se reflejan cálculos en el Anexo respecto al porcentaje de recorrido que, a lo largo de su itinerario, las hermandades invierten en el RO y fuera de él, demostrando que el proyecto propuesto conduce a una “privatización” de la Semana Santa que va en claro perjuicio del cofrade de a pie. 

Con el objetivo de argumentar lo antes expuesto, se plantea un análisis comparativo entre el actual RO y la propuesta de RO planteada desde San Julián. Para ello, se ha empleado el programa informático Google Earth y las herramientas que éste concede para cálculos de distancias sobre el plano.




SOBRE LA NECESIDAD DEL CAMBIO.

 El proyecto de reforma del RO ha sido impulsado por la cúspide de la jerarquía cofradiera que representa la Agrupación de Cofradías. Pero la necesaria y justa inquietud en pos del cambio que debiese palparse en el orbe cofrade, en referencia a un asunto de tanta trascendencia, no existe.

 Al contrario, el cofrade de base se encuentra cómodo en el escenario actual, que favorece la explotación del callejero por sus hermandades, que permite su fácil participación activa como espectador y que resulta asequible para la búsqueda de las hermandades en un Centro Histórico más liberado que el dibujado en el nuevo escenario. Este debate ha resurgido en varias ocasiones en los últimos años, fundamentado en distintos argumentos que han ido variando en función de las necesidades: las obras del metro, obsolescencia del recorrido, seguridad, y que en ninguno de los casos es debido a una reflexión profunda sobre la necesidad real de un cambio del RO.


PARTICIPACIÓN Y DEBATE

Las bases cofrades a las que nos referimos han quedado totalmente excluidas en el proceso de debate
y conformación del proyecto propuesto. Del mismo modo que se ofreció un modelo de transparencia
a la hora de presentar los proyectos, ¿por qué no ha imperado esa transparencia a la hora de debatir?

¿Existen actas de las 135 reuniones que se han realizado? Y en caso afirmativo, ¿por qué no son
públicas esas actas para que las bases cofrades conozcan hacia dónde dirigen la que también es su
Semana Santa?  Más aún, ¿por qué no tienen voz e implicación directa en el futuro que se escenifica?

Resulta irresponsable la gestión de un cambio sumamente trascendental a espaldas del porcentaje
mayoritario de composición de la Semana Santa: las bases cofrades. Junto a esto, no se entiende la
falta de claridad en aspectos tan fundamentales como el compendio de elementos que las cofradías
y hermandades han de aprobar, si solo es el trazado del RO propuesto o, por el contrario, también
se aprobarán los horarios e itinerarios que derivan de este y, en especial, la mayoría que se requiere,
llegando a producirse contradicciones entre miembros de la Agrupación. Así, los 3/4 requeridos que
expuso D. Pablo Atencia en los medios tras su reelección, chocan frontalmente con los 2/3 expuestos
por D. José María Souvirón en las jornadas Veranos de Pasión 2018, lo que refleja un posible sesgo
interesado en función de los apoyos recabados.



CONCLUSIONES


Por todo lo expuesto, y habiendo sido constatadas las virtudes del histórico RO y quedando demostrada la falta de solidez argumental de muchas de las supuestas bonanzas del proyecto presentado, alegamos por el mantenimiento del actual RO, considerando que es el trazado adecuado -asumiendo las modificaciones que sean pertinentes para la optimización de su función- en la ecuación compleja que aúna variables como la configuración urbanística del Centro Histórico, la distribución geográfica de las hermandades, los usos procesionistas de la ciudad y la idiosincrasia de sus cofradías.

Constatamos con pesar que la práctica totalidad de las soluciones propuestas en el contexto de la
implantación de un nuevo RO, son totalmente aplicables a un trazado histórico, vivo y tan actual como en su génesis. La Semana Santa de Málaga ha sido ejemplo, a lo largo de su historia, de su sólida capacidad para evolucionar y progresar sin que ello se haya traducido en virajes rupturistas que la alejen de sus señas capitales, que vertebran su esencia y la distinguen, y que la configuran como la
gran Semana Santa de Málaga. El actual RO forma parte de su ADN; un ADN transmitido de generación en generación y cuya extinción se plantea sin tan siquiera previamente haber aplicado esas mismas soluciones que se pretenden instaurar en el trazado propuesto.

El actual RO propone un discurso bellísimo y singular, discurso que rechazamos se encuentre caduco
y obsoleto -como se apunta, sin argumentos sólidos, desde las voces autorizadas encargadas de
promover la nueva propuesta-. El RO debe reinventarse: mejorando estéticamente, progresando en
seguridad y dinamizando el discurrir de las hermandades en su seno, aprovechando la coyuntura que
se va a vivir en los próximos años con la remodelación de la Alameda, hecho indispensable que no
debe ser desaprovechado como un aporte de calidad a nuestra Semana Santa. Pero, ante todo, lo que
no se merece este recorrido es que lo dejen morir, tal y como está ocurriendo.

Todas estas propuestas son compatibles con el histórico RO, por cuya defensa emitimos este manifiesto, confiando en que el propio colectivo cofrade, garante de la pervivencia de la tradición más hermosa de la Ciudad del Paraíso, reivindique el recorrido histórico de su memoria y de los que habrán de venir, que es patrimonio inmaterial y forma parte indisoluble de nuestra Semana Santa.
En Málaga, a 24 de julio de 2018.

Post data: Las fotografías intercaladas no pertenecen al informe, sino que son de mi propiedad ,realizadas en 2018, para dar más visibilidad al texto. 

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