Pasadas las 1.30 de la tarde ha tenido lugar en el colegio SAFA de El Palo la solemne eucaristía de reapertura de la capilla del centro educativo.
La principal novedad la constituye el hecho de que allí se venerará a partir de ahora a la imagen del Niño Jesús del Gran Poder, abandonando así definitivamente su periplo peregrino de casi una década por distintas parroquias del centro de Málaga.
Considero que así encuentra su lugar definitivo en un espacio sin referentes procesionistas, en un barrio de gran solera, como el Palo, que sólo tiene devociones gloriosas (Carmen y Rosario). Por tanto, es de esperar que la semilla pasionista cuaje en este emblemático barrio, todo con el matiz del centro escolar con lo que conlleva en el arraigo de las futuras generaciones de paleños y malagueños.
La capilla es pequeña y recoleta y está presidida por un crucificado de Olot, el Cristo del Mar, que sale en una procesión escolar. La aportación musical de la misa ha corrido por parte de un coro infantil con escenas muy simpáticas y propias de estas fechas.
Enhorabuena al colegio, al barrio de El Palo, y a Eduardo, porque se lo ha currado, como acostumbra en pro de Málaga. Algún día se te reconocerá como mereces.
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